Nalbandian no funciona como una maquinita.

David Nalbandian, tiene una fórmula poco convencional: no vive exclusivamente para el tenis, y se permite excentricidades, como recientemente al correr como un piloto más la XIX edición de las 1000 Millas, que se disputa en la Patagonia. David Nalbandian se permite matizar los requisitos estrictos de su carrera tenística, con pequeñas delicias que también siente como una pasión, y acerca de ello, comenta su coach, Martín Jaite:

"Con David compartimos algo. No hay que estar 24 horas pensando en el tenis, la vida no pasa solamente por eso. Hace poco se lo criticó porque se fue a un rally, un fin de semana de septiembre, en medio de los entrenamientos. Y los fines de semana son de descanso para él. A mí me parece bien que haga esparcimiento, le hace bien. Todo tiene riesgo, pero si lo manejás como una maquinita, Nalbandian no funciona. Eso él lo valora. ..."

En la vida de Nalbandian, el tenis va combinado con jornadas de descanso que incluyen pesca embarcado, saltos al vacío, y su pasión por el rally. Un tenista que con talento puede combinar su carrera tenística con una agenda a la medida de sus variadas pasiones. En las fotos fuera y dentro de las pistas se lo ve, como quien dice, disfrutando de la vida.

(imagen Clarín)